Siguen los ahorros. La sala cuna municipal está cerrada por vacaciones.

Las mamitas funcionarias, tienen que seguir trabajando y no tienen donde dejar sus hijos o hijas. Lo anterior es un derecho consagrado en el código del trabajo, nos indica un papá que señala lo difícil que es ponerse en ese caso, especialmente si no es de Maipú y ve los costos que pagan los nativos.

La información la enviaron mamás que no están afectadas directamente, pero que son solidarias con su género.

Cinco organizaciones sociales: Un Pancito y un Café, El Abrazo Solidario, Misioneros de Cristo de la Calle, Sarita solidaria y Divina Providencia se reunieron el jueves 10 de febrero con el fin de realizar una jornada solidaria que permita aliviar a algunos hogares el problema de la alimentación diaria, pero además incluir a la gente de calle.

Pasada las 9:30 y hasta las 16:00 horas del jueves 10 de febrero, las 5 organizaciones agrupadas se prepararon para repartir 200 colaciones, mientras en el intertanto repartieron cerca de 150 café a las personas que circulaban por el sector. El lugar en que se ubicaron fue en el sector aledaño al Memorial, frente al acceso oeste de la Municipalidad.

Con la conformidad de haber cumplido el cometido, a las 16:00 horas comenzaron el retiro de las instalaciones para planificar al día siguiente otro desafío en el futuro cercano.

Una de las organizadoras, Priscila Salcedo, nos señaló que el jueves 10, muchos vecinos y vecinas en situación de calle concurrieron al llamado fraternal. Las nuevas necesidades y la problemática vivida en la actualidad con la cesantía, agravada por la pandemia que nos afecta, hace que se visibilice más las necesidades que padecen vecinos de diferentes sectores de la comuna que llegaron a la Plaza de Maipú a plato fraternal

Otras necesidades quedan a descubierto, de personas que buscan una oportunidad laboral y otras que se ven obligadas a pedir dinero para pagar una pieza en donde dormir. Esto último nos contaba Priscila Salcedo, un vecino que duerme en la calle en las cercanías del municipio y que nos confidenció que hace un mes no comía un plato de comida caliente.

Otros se encargarán de ver las injusticias, pero mientras no haya soluciones, ¡las organizaciones …! ¡Seguiremos Adelante!